Castillos de Portugal

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Una de las pasiones que se pueden tener en la vida es la de fantasear con una época anterior, una donde existían reyes y reinas, donde había princesas y príncipes encantados, y donde, como en los cuentos de hadas, la vida era mucho más tranquila y agradable. Quizás sea por eso que uno de los turismos que más se realiza en el mundo es aquel que está relacionado con los castillos de tal manera que las personas suelen visitar o hacer turismo para contemplar los castillos del lugar donde habían ido de vacaciones.

Por ese motivo hemos pensado que hoy nuestro artículo va a ir enfocado en los castillos que puedes encontrar en Portugal. En realidad hay muchísimos y otros que quizás no se conozcan tanto pero que también podrías pasarte a visitar. Al ser castillos en todo Portugal es posible que no puedas verlos todos pues cada uno estará en una ciudad diferente pero si te recomendamos ver algunos de ellos.

El listado de castillos de Portugal incluye 22 castillos que se conozca siendo éstos:.

    • Castillo de AlcobazaCastillo de Almada
    • Castillo de Almourol
    • Castillo de Alter Pedroso
    • Castillo de Cera
    • Castillo de Elvas
    • Fortaleza de Diu
    • Castillo de Guimaraes
    • Castillo de Lanhoso
    • Castillo de Leiria
    • Castillo de Marvao
    • Castillo dos Mouros
    • Castillo de Óbidos
    • Castillo de Paderne
    • Castillo de Palmela
    • Castillo de Pombal
    • Castillo de San Jorge de Lisboa
    • Fuerte de San Felipe
    • Castillo de Santa María de Feira
    • Castillo de Tomar
    • Castillo de Soure
    • Castillo de Silves
    • Los castillos más conocidos de Portugal

      1. Castillo de Marvao

      Uno de los castillos más conocidos de Portugal es el Castillo de Marvao. El Castillo de Marvao se encuentra en el parque natural de la sierra de San Mamede ubicado en la zona alta y dominante sobre el pueblo de Santa María de Marvao y enclave muy importante en época de guerras.

      Los muros de este Castillo están reforzados por Torres en diferentes líneas defensivas, todas ellas concéntricas. La línea interna tiene dos torres y un torreón; la línea intermedia tiene varias almenas y torres macizas; y la línea externa está compuesta por la barbacana, una estructura medieval que solía servir de soporte al muro de contorno o a cualquier torre que hubiera cerca de tal manera que se le daba más solidez a la línea principal de defensa y a los muros de aquello que se quería proteger.

      Otro de los castillos que se conoce mucho es el Castillo de Tomar, un castillo templario que forma parte del patrimonio de la humanidad desde 1983.

      Este Castillo de corte militar tiene estilos románicos, góticos, y renacentistas. A lo largo de los años y de la historia del Castillo ha ido rediseñándose según los inquilinos que iba teniendo. Está constituido por una doble muralla y un patio de armas, dispone de alcanzaba y la torre del homenaje así como primitivas villas y torres importantes. En su interior también puedes encontrar el Convento de Cristo, uno de los principales monumentos de la arquitectura portuguesa fundado en 1162 por el Gran Maestre del Temple en Portugal y actualmente es uno de los lugares más visitados en Portugal.

      El Castillo de Tomar, desde su creación en 1160 ha ido sufriendo modificaciones y ampliaciones hasta lo que es ahora, uno de los castillos medievales más genuinos que puedes encontrar en este país.

      2. Castillo de Almourol.

      El Castillo de Almourol se erige en una pequeña isla del río Tajo en el concejo de Vila Nova Da Barquinha, distrito de Santarém en Portugal. El castillo de 18 metros de altura fue edificado por romanos y posteriormente ocupado por árabes quienes lo denominaron al-morolan, traducido al español como: “Piedra Alta”.

      En el año 1129 ésta fortaleza fue conquistada por las tropas portuguesas al mando Alfonso Henriques, quien decidió unirlo a la serie de castillos y torres que servían de defensa para Portugal, conjuntamente con la Torre de Belém en Lisboa, el Fuerte de San Sebastián de Caparica y la Torre de San Antonio en Cascais.

      Por su ubicación estratégica el Castillo de Almourol fue un centro de control aduanero entre la ciudad de Lisboa y el resto del mundo. Con el correr de los años fue utilizado con distintos fines pero siempre como sede de eventos de importante magnitud. Fue nombrado residencia de la República Portuguesa, y al llegar la década del `40 y `50 comenzó a ser remodelado con un diseño romántico como característica principal.

      Este fuerte construido a base de mampostería con pequeños detalles de sillares en la base y las esquinas de la Torre de Homenaje, puede ser visitado a lo largo del año por el turismo que hasta allí llega para disfrutar de años de historia concentrados en un solo lugar.

      La única forma de llegar a este punto se da mediante el cruce del río por embarcaciones que cobran dinero por hacer viajes de ida y vuelta hasta la isla.

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