Que ver en Monçao

Monçao que ver y hacer

Hoy en día la Coca ya no atemoriza a la población como antiguamente, sino que simboliza este día de fiesta que aquí se celebra a lo grande.

En la festa do Corpo de Deus, nuestro Corpus Christi, la Coca o Rabixa, un dragón móvil con grandes escamas, sale a pasear por las calles de esta villa portuguesa unida, por un puente al sur de Pontevedra. Hoy en día la Coca ya no atemoriza a la población como antiguamente, sino que simboliza este día de fiesta que aquí se celebra a lo grande.

La procesión, que comienza a las 16.30 h, es un acto colorista que reúne a la treintena de hermandades del municipio portando sus pendones. El cortejo,como homenaje a los labriegos de estas tierras y a sus animales, está presidido por el Boi Bento, un bóvido adornado con cintas. Una vez que acaba la procesión se escenifica en O Souto, el combate entre el bien y el mal, representados por el caballero San Jorge y por la Coca.

VINO, PESCA Y GALGOS

Las fiestas se prolongan hasta el domingo, con actividades centradas en su gastronomía y sus costumbres.La región vale do Minho, a la que pertenece Monçao, es sobre todo conocida por ser una de las nueve sub-regiones de la denominación de origen vinho verde. Verás que tanto los valles como las vegas del Miño están cubiertos por terrazas de viñedos.

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Desde hace un par de años se celebra durante este día una fiesta del vino alvarinho (similar al gallego), de la caza y de la pesca, en la que no faltan pruebas de tiro al plato, demostraciones de pesca de pluma, carreras de galgos, así como exhibiciones de perros de caza y aves de cetrería. Aprovecha el día, si te lo permite la multitud, para internarte por el recoleto y encantador centro de la localidad. El río Miño es una presencia permanente. Obsérvalo desde lo alto de las murallas o baja al parque anexo a su famoso balneario.

Una visión distinta del río te la dará la aldea de Lapela, con su torre medieval casi besando las aguas. En los alredores visita el palacio da Brejoeira y su bodega (a 6 km), el monasterio románico de Longos Vales y el puente medieval de Riba de Mouro. De vuelta a Monçao, despide el día en una de las terrazas de la praça de Deu-la-Deu, a ser posible la del café Mira Espanha, con vistas al Miño.

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