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Fussen que ver y hacer
Una ciudad llena de romanticismo
Alrededor del casco antiguo, junto al río Lech de aguas color turquesa, con callejones y ostentosas iglesias barrocas se agrupan los barrios de Bad Faulenbach, Hopfen am See y Weißensee en un idílico paisaje lacustre en las faldas de los Alpes.
La variada naturaleza llena de bellezas como sierras, colinas de Algoia e idílico paisaje lacustre ofrece además un sinfín de posibilidades para unas inolvidables vacaciones activas.
El romántico casco antiguo de Füssen entusiasma con el palacio Alto de estilo gótico tardío, el monasterio Santo Mang, las casas con frontones medievales e idílicos lugares. Los castillos reales Neuschwanstein y Hohenschwangau (4 Km.), la iglesia Wieskirche (25 Km.), Oberammergau, el palacio Linderhof (50 Km.) y la montaña Zugspitze (60 Km.) son accesibles desde aquí.
El Palacio Alto
El palacio Alto construido en el siglo XIII sobre el casco antiguo fue sede episcopal y residencia veraniega y perteneció, en el siglo XVI a los palacios medievales más importantes de Suabia.
Es destacable la pintura de ilusiones. La “sala del caballero” fue usada como representativo salón de fiestas. En el ala norte se exponen obras de arte renacentista y del gótico tardío.
Iglesia parroquial barroca Santo Mang
La iglesia, construida sobre la tumba de Santo Mang, bajo los planos del arquitecto barroco Herkomer está decorada en su interior con finos zarcillos, nubes con cabezas de niños, conchas y estilizadas flores. El desarrollo temporal comienza en el coro de los monjes (1709). En su inauguración en 1717 probablemente todo el ambiente era estucado, mientras que el mobiliario no estaba del todo terminado.
Castillo Neuschwanstein
A tan solo cuatro kilómetros al sur de Füssen, sobre la ciudad y el lago, rodeado de bosques se encuentra una de las edificaciones más conocidas en el mundo y también el más visitado en Alemania: El castillo de ensueño Neuschwanstein
Fue construido en la década de 1880 por el rey Ludwig II de Baviera, quien tenía un gran interés en la arquitectura y en la historia medieval. El castillo tiene un diseño único que mezcla elementos de la arquitectura romántica y medieval, y es conocido por su belleza y por su rica decoración interior.
Cuando entras, te das cuenta de inmediato de la atención al detalle que se puso en su construcción. La sala principal del castillo, el salón de Simeón, es una de las más impresionantes, con sus altos techos y su elaborada decoración en oro y plata. También hay una capilla en el castillo, que tiene una impresionante cúpula dorada y vidrieras coloridas.
Otra de las grandes atracciones es la sala del trono, que tiene un trono de mármol y un techo con pinturas que representan escenas de la mitología nórdica. También hay una sala de baile con un suelo de madera tallada y un techo con frescos que representan escenas de la mitología griega.
Füssen está enclavado en una naturaleza variada entre sierras, montes de Algoia y un idílico paisaje lacustre.
Rincón de reyes “Königswinkel”
El rincón de reyes “Königswinkel” alrededor de Füssen y el castillo Neuschwanstein es uno de los paisajes más hermosos de Baviera: altas montañas, tierras con altibajos por delante de los Alpes y dentro, el río Lech y más de diez lagos.
Montaña Zugspitze
Una excursión a Zugspitze a 70 kilómetros de distancia. La montaña más alta de Alemania (2962 m) en los Alpes alemanes se puede alcanzar con el ferrocarril de cremallera o en funicular. Una inigualable vista panorámica ofrecen las cimas colindantes. Para los amantes de la cultura hay una muestra de arte en el salón de exposiciones.
Lago Forggensee
En las orillas del lago Forggensee, al norte de la ciudad se construyó la sala teatral “Festspielhaus”. El lago es un gran embalse del río Lech, un lugar ideal para realizar actividades de ocio. Es un destino popular de paseantes, excursionistas y se pueden realizar todos los tipos de deporte acuático.
Excursiones aconsejadas para ver Fussen y alrededores
La mayor parte de la historia de Füssen está en su zona céntrica que los turistas convierten hoy en el centro de los acontecimientos. Con coche, bus o en tren se dejan explorar cómodamente los hermosos pueblos de Baviera y Tirol.
Iglesia Wieskirche (25 Km.)
Casi un deber es realizar una excursión a la iglesia Wieskirche, joya del Rococó y declarada patrimonio cultural de la humanidad por la UNESCO. La capilla muestra en inigualable perfección, como junto con piedra y estuco se puede emplear la luz como elemento de construcción. Auténticos peregrinos dejan el coche en Steingaden y recorren el camino a pie en aproximadamente una hora.
Palacio Linderhof (40 Km.)
El fantástico pequeño palacio de Luis II en el balneario climatológico Ettal con el monasterio del mismo nombre está rodea do de un pintoresco parque con juegos de agua, de la gruta de Venus y del quiosco moro. Es el único palacio que el rey Luis II vio completamente ter minado.
Oberammergau (60 Km.)
A solo 50 kilómetros de distancia espera ser visitada la región Oberammergau. El encantador lugar es conocido mundialmente por sus pinturas de fachada, su xilografía y los Misterios de la Pasión, que se representan cada diez años después del año de la peste en 1633. No menos famosa es la “Ruta Romántica”, que roza venerables ciudades y curiosidades turísticas una tras otra desde Wurzburgo hasta Füssen. Y estas a medio camino entre dos grandes ciudades, así que puedes ver Munich o ir de viaje a Austria y visitar Innsbruck.
Füssen y sus alrededores son un lugar ideal para disfrutar de la historia, la cultura y la belleza natural de Alemania. Si tienes la oportunidad de visitar la zona, te recomendaría que no te pierdas algunas de las atracciones mencionadas anteriormente, y que disfrutes al máximo de tu estancia en esta maravillosa región. ¡Buen viaje!
