Que ver y hacer en Lerma
Lerma está situado 40 km al sur de la capital burgalesa y su historia va unida de forma inevitable a Don Francisco Gómez de Sandoval y Rojas, primer Duque de Lerma. Gracias al beneplácito de Felipe III, el Duque quiso convertir Lerma en la corte de recreo de la realeza, para lo que contrató los arquitectos más importantes. El resultado de esa obsesión son las maravillosas construcciones que nos dejó.
Para verlas, entra al recinto histórico por el árco de la Cárcel, la única puerta que queda de la antigua muralla. Tras cruzarla, la calle del Tercio te llevará a la ex colegiata de San Pedro, del siglo XVII. Fuera, destaca su fachada herreriana, y dentro, su retablo mayor barroco, la estatua del Arzobispo de Sevilla, tío del Duque y la preciosa mesa regalada por el Papa Paulo V.
Al salir, sigue la calle Mayor hasta la plaza Mayor, un espacio típicamente castellano que alberga el edificio más famoso de la villa: el Palacio Ducal, mandado construir por el Duque sobre el antiguo castillo. Fue frecuentado por la nobleza de la época y por escritores como Lope de Vega o Góngora.
Cerca, en la plaza de San Blas, visita el Convento –pide cita en la oficina de Turismo–, la construcción que más enorgullecía al Duque.
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La pesadilla de napoleón
En la plaza de Santa Clara verás el sepulcro de otro personaje de la villa: El Cura Merino. Fue precursor de la guerrilla contra las tropas de Napoleón, al que hostigaba tanto que este llegó a decir “prefiero la cabeza de ese cura a conquistar cinco ciudades españolas”.
No te pierdas las extraordinarias vistas de la vega del río Arlanza desde el mirador de los Arcos. Aquí está el convento de Santa Teresa, con la oficina de Turismo y el centro de Interpretación de la villa.
A escasos metros se encuentra el convento de la Ascensión, fundado por el hijo del Duque y el más antiguo de los monasterios de Lerma.
Pasión muy viva
La plaza de Santa Clara y el palacio Ducal son dos de los escenarios en los que se representa la Semana Santa de Lerma, una pasión viviente en la que participan unas 250 personas. Este año, la fiesta comienza el 28 de marzo con la procesión de la Borriquilla, en la que los niños reciben el Domingo de Ramos con palmas adornadas con golosinas.
CÓMO LLEGAR:
En Madrid, coge la A-1 y, en Estación Ferrocarril/Lerma, la comarcal BU-115, que nos lleva hasta Lerma.
MÁS INFORMACIÓN
Oficina de Turismo. Audiencia, 6 Bajo. 947 17 70 02
