Leon que ver y hacer
Desde su inauguración, en abril de 2005, el Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León (MUSAC) se ha convertido en un nuevo símbolo de la ciudad. No sólo por su espectacular edificio de vidrios de colores, sino por su carácter abierto y gratuito con cabida para exposiciones, música, cine y charlas. Incluso la gastronomía se ha hecho un hueco en este museo con un responsable de lujo: Carlos Domínguez Cidón, poseedor de una estrella Michelin y del prestigioso restaurante Vivaldi en el centro de León. Tanto es así que el barrio donde se ubica el MUSAC, las Eras de Renueva, ha pasado de ser un lugar residencial junto al río Bernesga a la nueva zona de tapeo y cocina creativa.
Aquí verás los edificios más modernos de la ciudad, como el Auditorio, de los mismos creadores que el MUSAC. Junto a él está la inmensa fachada plateresca de San Marcos, una joya del Renacimiento que en la actualidad alberga una iglesia, el anexo al museo de León (la exposición principal se ha trasladado hace un año a otro edificio, en la plaza de Santo Domingo) y el Parador de San Marcos, con una lujosa decoración interior.
Pero donde realmente bulle la vida de León es en su casco antiguo, que concentra una infinidad de locales nocturnos, cafés en sus múltiples plazas y bares para el tapeo, que regalan un pincho (cada bar tiene su especialidad) con cada consumición en sabrosa competencia. Lo que más te sorprenderá es descubrir un rico patrimonio histórico que en los últimos años se está cuidando con más mimo, con la recuperación de palacios y de las cercas medievales, y recientes excavaciones como la de la cripta de la calle Cascalería. También se ha puesto recientemente en marcha una ruta romana que recorre la muralla aunque, de momento, sólo se realiza con escolares.
Tiempo para callejear
León, con numerosas calles peatonales, parques y zonas verdes, es una ciudad ideal para ir a pie o en bici, así que olvídate del coche porque no lo vas a necesitar. Puedes acercarte a la plaza de Regla y dejarlo detrás, en un aparcamiento gratuito. Aquí se alza la Catedral, un impresionante edificio gótico que, si por fuera deslumbra, al entrar se entiende por qué las vidrieras son su elemento más afamado. Hasta 2009 existe un plan para restaurar éstas y otras partes del templo.
Las obras incomodan pero, a cambio, te permiten obtener una visión distinta del edificio y las vidirieras: subido en una plataforma elevada sobre la nave central. Se puede visitar de martes a sábado cada media hora.
Al lado de la Catedral, asómate al Palacio Episcopal que, tras su rehabilitación, luce un precioso patio pavimentado. Por la calle Ancha, la más animada del centro, encontrarás tiendas, palacios y edificios modernistas. Aquí también verás cafeterías, como el Café Gran Capitán, y confiterías como Alonso, con productos típicos de la provincia. Termina en la plaza de San Marcelo, donde te llamará la atención el edificio de Botines, obra de Gaudí y en cuyos sótanos hay una sala de exposiciones de arte. A su lado está el renacentista Palacio de los Guzmanes, sede de la Diputación, con un magnífico patio interior.
Capilla sixtina’ del románico
Piérdete por las calles del barrio húmedo (llamado así por sus numerosas tabernas y bares), y en los alrededores de las plazas San Martín y Mayor. En esta última, los sábados y miércoles por la mañana se celebra un mercado en el que encontrarás cecina, morcillas, lengua curada y quesos elaborados en los pueblos de la montaña. También puedes comprarlos en el mercado y tiendas de la plaza de Conde Luna, muy cerca de aquí.
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Por la calle la Rúa, que recorren los peregrinos a Santiago, llegarás a una de las plazas más bonitas de León, la de Santa María del Camino, más conocida como del Mercado o del Grano, por haber acogido el mercadeo de este producto. La plaza conserva su aspecto medieval, con el suelo empedrado, las casas porticadas, una iglesia con la imagen de la patrona de la ciudad y un convento que alberga a los que van a Compostela. De noche, como el resto del barrio, los bares y cafés le dan un ambiente más actual.
Al norte de la calle Ancha, en el conocido como barrio romántico, acércate a la plaza de San Isidoro, donde se alza la colegiata del siglo XII, uno de los conjuntos románicos más valiosos de España. En su interior, además del museo, hay que admirar el Panteón de los Reyes, una verdadera Capilla Sixtina del románico.
DE TAPAS
En el barrio húmedo, prueba la morcilla y chorizo de La Bicha (plaza de San Martín), o las tostas de Latitud 42, (calle Matasiete). En el barrio romántico hay bares nuevos como Camarote Madrid (calle Cervantes), tradicionales como El Capricho, (plaza de San Marcelo) o diferentes como Té Houbi (Sierra Pambley, 5) con especialidades árabes. Para la primera copa de la noche, León Antiguo (plaza del Cid, 16) y para terminar, está de moda Glam (calle Platerías). En la zona del MUSAC pasa por El Chorco (Avda. Reyes Leoneses, 14), con tapas de cecina (foto) y bocaditos de calamares.
