Las ideas parecen no faltarles a los arquitectos cuando se les encarga la construcción de un nuevo edificio. En el caso de los complejos de viviendas se busca sobretodo aprovechar de la mejor manera los reducidos espacios y una buena comunicación de los diferentes ambientes del complejo. Si a este se le suma una idea original, el arquitecto habrá conseguido que su nombre figure en muchas revistas y como en esta caso en la red.
Piet Blom es un arquitecto holandés nacido en 1934 y que cursó estudios en la Academia de Arquitectos de Ámsterdam. Tuvo como a uno de sus principales profesores a Aldo Van Eyck, famoso arquitecto neerlandés.
A Piet Blom se le conoce por ser el arquitecto de las curiosas casas cubos o “Kubuswoning” como se le conoce en el idioma neerlandés. El proyecto de las casas cubo nació aproximadamente a principio de la década de los 70. Para el año 73, Blom ya tenía los primeros bosquejos y dos años más tarde se decide a construirlas en la localidad de Helmond. Fueron tres en total y el inicio de muchas más, pero en otras regiones de Holanda. Para 1977, el número se elevó a 21 cuando construyó 18 casas cubos en las inmediaciones de un centro comercial. A pesar de sus logros, Blom deseaba construir sus casas de manera más masiva y en 1978 tuvo la oportunidad de construirlas en un barrio de la ciudad de Rotterdam. Al inicio del proyecto se encontraba establecido que se construirían 78 cubos y además un centro cultural. Finalmente fueron solo 32 cubos y sin el centro cultural. Todo quedó listo para el inicio de las acciones en el año 1982, sin embargo debido a problemas financieros no se concluyó el proyecto hasta dos años después.
Como era muy obvio, las casas se vendieron en su totalidad aún antes de la finalización del proyecto. Los curiosos no tardaron en llegar y los residentes le sacaron provecho a esto: empezaron a cobrar entradas. Cada una de las casas cubo posee tres niveles. La primera planta alberga a la cocina, el salón y el hall. En la segunda planta se encuentra los dormitorios y un baño. La última planta es usada usualmente como un pequeño jardín. Por su originalidad, la Academia de Arquitectura de Rotterdam ocupó dos cubos durante los años 1985 y 1998. A pesar de su originalidad una cuarta parte del espacio de cada cubo es inhabitable por su forma.
